Síndrome Piramidal

SÍNDROME PIRAMIDAL O PIRIFORME

El músculo piramidal es el encargado de la extensión rotación externa de la cadera y de la abducción de ésta. Su función principal es proporcionarnos soporte y estabilidad, tanto en bipedestación como cuando estamos en movimiento.
También llamado músculo piriforme, se trata de un músculo par ( uno en cada pierna ),que se encuentra en la parte profunda de la región del gluteo; invervado por el nervio del músculo piriforme, los nervios espinales L5 y S1 (rama propia del plexo sacro).

¿ CUALES SON LOS SÍNTOMAS PRINCIPALES DE SÍNDROME PIRAMIDAL O PIRIFORME?

Por lo general, los síntomas comienzan con un fuerte dolor en uno o ambos glúteos, que pueden irradiar hacia la cara posterior del muslo, y que pueden incluso llegar a la rodilla o al pie, además si existe un atrapamiento del nervio ciático, es decir, el músculo piriforme presiona sobredicho nervio, el dolor puede volverse más intenso en su recorrido.

¿CUALES SON LAS CAUSAS MÁS FRECUENTES?

Las causas más frecuentes son:

  • Permanecer largos periodos de tiempo sentados
  • Exceso de actividades deportivas ( correr, caminar, saltar,…)
  • Traumatismos por accidentes o caída.
  • Heridas penetrantes
  • Alteraciones biomecánicas y malos hábitos posturales( alteraciones de la marcha, problemas en los pies,…)
  • Discopatias y otras alteraciones degenerativas, como hipertrofia, parálisis cerebral, o problemas circulatorios como un pseudoaneurisma en la arteria glutea menor.

 

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL

El diagnóstico precisa la diferenciación de otras lesiones como la bursitis, la trocanteritis, la radiculopatía de la L5 – S1, lesión del nervio ciática, síndrome de los isquiotibiales, sacroileitis entre otras.

TRATAMIENTO

La sesiones de quiromasaje, osteopatía y acupuntura combinadas entre sí dan muy buenos resultados, siendo apoyadas, en casos muy severos, de ultrasonidos, tens y magnetoterapia, según necesidades propias del paciente.

PREVENCIÓN

Podemos prevenir esta lesión

  • Manteniendo una buena salud postural
  • Realizando ejercicios para fortalecer glúteos, caderas y lumbares.
  • Realizando estiramientos para mejorar y mantener los músculos y tendones , y evitar lesiones.
  • Calentar bien antes de realizar una sesión de entreno.
  • Dormir con una almohada entre las piernas , si dormimos de costado.

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