La palabra quiromasaje proviene del griego y significa “amasar con las manos”. Utilizamos la palabra quiromasaje para referirnos no solo al masaje manual, sino también a las diferentes técnicas recogidas por el profesor Ferrándiz García, donde se dan distintas combinaciones de maniobras como pueden ser la fricción, la presión, la percusión o vibración (entre otras).
El quiromasaje es beneficioso para reducir los niveles de estrés, nerviosismo, irritabilidad, etc. Tiene efectos analgésicos, calmando los dolores en caso de contracturas, agujetas o tensiones musculares. También mejora la circulación linfática, ya que aumenta la microcirculación. Ayuda a la movilidad y la elasticidad de las articulaciones.
Proporciona una gran sensación de bienestar que facilita el alivio del dolor y el desbloqueo emocional. Aumenta la secreción de los jugos gástricos, la función hepática, y estimula el peristaltismo favoreciendo la absorción de nutrientes y la eliminación de los productos de desechos.
También encontramos multiples beneficios al nivel respiratorio, ya que aumenta la oxigenación pulmonar, y esto ayuda a la alcalinización de la sangre.